Según comenta la gente del
pueblo, en Cárcar se hizo una batida para cazar jabalíes, como consecuencia
algunos huyeron. Uno de ellos se despistó en su huida y accedió al pueblo por la Cuesta de Lerín llegando a la calle Jesús y a la plaza de la iglesia donde tuvo que saltar por
encima de un coche que le impedía el paso. Seguidamente se refugió en el local
de Vending de la calle Mayor, en el interior
había varias niñas comprando chucherías que rápidamente salieron asustadas sin
heridas. El jabalí chocó con las máquinas expendedoras, produciéndose heridas
con derramamiento de sangre. Seguidamente huyó corriendo por la calle Mayor,
con mucha suerte que no se encontró con
ninguna persona, llegó hasta el Ayuntamiento y bajó por la calles Portal
y Carretera de Berbinzana hasta las afueras del pueblo donde desapareció.
No cabe ninguna duda que ha habido mucha suerte que ningún vecino fuese atacado por el animal en su huida, porque a esa hora en la calle Mayor hay mucha gente congregada tomando el aperitivo antes de la cena del sábado noche. Esta noticia fue muy comentada entre los vecinos del pueblo durante la noche y a lo largo del día siguiente.
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