El esquileo de ovejas o
esquilo, como dicen muchos esquiladores - existe desde que hay ovejas. Las
razones para llevar a cabo esta trabajosa tarea son aliviar del calor al animal
en los meses de verano y explotar la riqueza de la lana, que dependerá de la
raza a la que pertenezca el ganado. La producción y comercialización de la lana
constituyó durante los siglos bajomedievales una actividad muy importante de la
economía. Actualmente con la invención de tejidos de fibras acrílicas ha hecho bajar el precio de la lana.
Con la llegada de la primavera los
ganaderos preparan el esquilo de las ovejas para que no pasen calor en los
meses de verano. Los esquiladores se organizan en cuadrillas que son contratadas
para esquilar en los corrales de las corralizas. Actualmente la manera de esquilar
ha cambiado con respecto al siglo pasado, no hace falta atar a los animales de
las patas y las herramientas de esquilo son eléctricas. Cada esquilador puede
cortar la lana de más de 100 ovejas al día.
Quedan pocos ganaderos en nuestro
pueblo debido a que cada vez son menos rentables los rebaños, hay pocos
pastores porque requiere estar pendiente de las ovejas todos los días del año,
el alimento de las ovejas ha subido mucho el precio, las hierbas de las
corralizas cada año son más escasas por la sequía y por el cultivo intensivo de
las tierras sin dejarlas descansar.
Miguel Rodríguez Otermin es el último
ganadero de Lerín con rebaño propio y con un corral en el término de Esquiroz, donde
año tras año realiza la tarea del esquilo cuando llega el mes de mayo. Una
cuadrilla de esquiladores navarros con herramientas y métodos modernos, se
encargan durante un día de dejar las ovejas sin lana para aliviar a los
animales de los calores del verano.
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